«Aprender a decir que no» es un gran desafío
En mi consulta, me encuentro muchas veces con este problema: muchas personas, y en particular mujeres, tienen dificultad para aprender a decir que no. Parece algo sin importancia y sin embargo, se evitarían mucho sufrimiento si supieran decir que no.
¿Porqué tantas mujeres no saber decir que no?
Podemos encontrar una respuesta en la educación recibida sobre todo para mujeres mayores. En España, en particular, ser mujer durante mucho tiempo iba de la mano a ser obediente, a aceptar su condición sin rechistar, a buscar el bien común y este pasaba por cuidar de los demás sin una queja.
Es cierto, menos mal muchas han reaccionado. Y los tiempos y mentalidades han cambiado.
Entonces, ¿Porqué nos cuesta tanto decir que no? Quizás porque ganamos más al decir que si….
¿Cuáles son las ventajas del «si, de acuerdo»?
Al decir que si, que sea a nuestr@s hij@s, a nuestr@s compañer@s, a nuestr@s jef@s, ganamos tiempo… o más bien creemos ganar tiempo y paz.
Si a las ocho de la noche la hija de Elena, de 5 años, coge un berrinche porque no quiere bañarse es muy probable que Elena le permita no bañarse ese día. Esta cansada, ha trabajado todo el día y al final no le apetece ni gritos, ni peleas. Ha ganado tiempo y paz.
También podemos ganarnos el reconocimiento de otra persona. Angela tiene una compañera de trabajo muy maja y le gusta mucho su compañía. Además no tiene muchas amigas. Así que cuando su compañera le pide que le acabe el informe que tiene que entregar a su jefe dentro de dos horas y que no lo puede hacer por un dolor de cabeza debido a la juerga de la noche anterior, Angela acepta porque recibe a cambio una sonrisa preciosa y su nueva amiga le invita a la fiesta siguiente. Ha ganado su aprobación….
Igualmente creemos que demostramos nuestro amor al decir que sí. Si sus hijos no tienen tiempo de recoger su habitación porque estudian. es muy probable que Carmen no insista en que lo hagan y lo hará en su lugar…
¿Esas ventajas del «si, de acuerdo», son realmente benéficas ?
Como todo, nada es blanco, nada es negro. Depende de la intensidad.
Tenemos que ser atentos a nuestros actos. Permitir a una niña no ducharse una noche no es un problema en sí. Aceptar echar una mano a un compañero tampoco. Recoger la habitación de tus hijos tampoco lo es.
El problema de no saber decir que no es cuando se hace habitual y una pierde todo lo que pensaba haber ganado.
Es cuando la niña de Elena, al entender que su madre cambia de opinión cada vez que tiene un berrinche, se aprovecha de la situación y hace lo que le da la gana. Elena no ha sabido parar los pies a su hija y ahora se siente desbordada por las exigencias de su pequeña.
Respeto a Angela, le pasa lo mismo. Su super amiga le ha invitado a una fiesta, es verdad y se lo ha pasado genial…. Pero ahora da por supuesto que le acabará todos sus trabajos cuando le conviene.
¿Y con Carmen? ¿ Qué ha pasado? Pues Carmen sigue recogiendo la habitación de sus hijos, haciendo sus coladas, preparando las comidas…. el problema es que sus hijos ya tienen 25 y 28 años….y está cansada..
¿Cómo se siente una cuando no ha sabido decir que no?
Tanto Carmen como Angela y Elena están desesperadas.
Pero no solamente esto, ellas que pensaban haber ganado la aprobación de los demás se sienten cada vez menos valoradas menos queridas y su auto-estima ha bajado enormemente.
Y además, están enfadadas.
Lo que querían demostrar a través de sus actos era amor, comprensión y se les ha ido de la mano. Al convertir esas actitudes en costumbre ( en lugar de ser excepciones) han dejado a los demás tomar poder sobre ellas. Ahora están enfadadas consigo mismas y con los demás.
Se deprimen y se sienten inútiles. Su auto-exigencia no les permite perdonarse.
¿Las Flores de Bach nos pueden ayudar a saber decir que no?
Por si no sabes lo que son las Flores de Bach te diré que son remedios naturales que equilibran nuestras emociones y nos permiten reencontrar el camino de la salud tanto física como emocional.
Si además haces un trabajo consciente al tomarlas tu estado emocional mejorará más rapidamente de maneran más duradera.
Te voy a ser sincera: Nada ni nadie te puede ayudar si no pones de tu parte. Eres la dueña de tu salud y eres la dueña de tu vida.
Aprender a decir que no te va a suponer un gran reto. No va a ser fácil pero va a ser muy satisfactorio. Dejarás de sentirte mal, triste, cabreada, enfadada, culpable para sentir que coges tu propio poder. Y, te va a parecer increible pero verás cambios en tu alrededor. Al principio no va a gustar a todos tus cambios de actitud. A los hijos de Carmen les va a fastidiar no encontrar ropa limpia para salir, a la niña de Elena, le va a cansar gritar tanto para no conseguir nada, y a la amiga de Angela le va a molestar cuando tenga que decir a su jefe que no ha acabado su informe a tiempo.
Quizás Angela pierda una amiga, pero ¿era realmente una amiga?. Quizás los hijos de Carmen se van a cabrear pero acabaran haciendo su colada, y la hija de Elena dejará de chillar tanto.
Y poco a poco, se darán cuenta que la paz está volviendo, que la gente les respeta más, que si tienen que hacer un favor lo hacen si realmente les apetece y si no, pues lo dicen.
Se sentirán más libres.
¿Qué Flor de Bach me puede ayudar a decir que no?
La Flor de Bach por excelencia para saber hacerse respetar es la Centaura ( Centaury en inglés).
Se puede combinar con otras esencias, por ejemplo con el Acebo- Holly si sientes mucho enfado, Pino- pine si te culpabilizas por la situación, Sauce- Willow si tienes rencor….
En la consulta, al hablar con la consultante elaboro el preparado de Flores de Bach más acorde a sus necesidades.
Espero que este artículo te haya sido útil.